Un hombre puede arrepentirse mucho de haber abandonado su hogar y haber dejado a su familia. Tras muchos años de construcción, de haber amado, de haber tenido a sus hijos, de haber luchado por todo, de haber amado mucho a su mujer, llega un momento en que el hombre puede cansarse o rendirse.
Puede tratar de liberarse de las responsabilidades, o del cansacio, pero no porque no ame a su familia, sino porque tras muchos tiempo, años tal vez, su estado emocional se carga y sin darse ni cuenta tiende a buscar la forma de sentirse libre y mejor.
Pero en realidad, en muchos casos, más bien, lo que hace es esclavizarse aún más, porque puede terminar con otra mujer, con más responsabilidades, incluso cargando otros hijos que no son ni suyos y por el otro lado seguir con las responsabilidades de su familia anterior.
Horarios, recuerdos, manutenciones, custodias etc. Y sobre todo eso, recuerdos. Esos que muchas veces no lo dejarán vivir en paz, por más que siga con una nueva vida. Suele pasar.. Sería comparable a pasarse mucho tiempo construyendo un barco, y al finalizarlo, cuando ya está listo para navegar, dejarlo por el cansancio del mismo proyecto de construcción.
Tal vez llega un instante que el hombre no está harto de la familia, sino que sólo está cansado y necesita un periodo de tiempo para asumir todo lo que ha vivido y construido. Por así decirlo, el hombre, no es tan valiente como la mujer, no tiene tanto aguante y tiende a buscar el camino fácil, en este caso, dejarlo todo y cambiar de vida o familia. “De barco”.
Creyendo que así estará mejor. Sin embargo la mujer, puede estar más cansada aún que el hombre, pero para nada se le pasa por la cabeza abandonar lo que ha construido durante tanto tiempo y sigue con amor a la familia y a lo que se ha comprometido desde un principio.
Aunque haya casos distintos, porque sí los hay, casi siempre es así. Duele o moleste aceptar esta realidad, la mujer suele tener más aguante y paciencia.
Si un Hombre Abandona a su Familia por una Mujer, Termina Arrepintiéndose Tarde o Temprano
En muchas ocasiones, el hombre puede acertar y liberarse de todo y sentirse muy bien en su nueva vida, porque al dejar el antiguo ciclo, su guerra interna muere, pero en gran parte no suele pasar así.
Normalmente el hombre termina arrepintiéndose, porque llega un momento en el que extraña las atenciones de su bella ex esposa, los momentos de familia, como cumpleaños o fiestas típicas, termina extrañado las tardes de sofá con sus hijos o los domingos de campo paseando con todos juntos.
El hombre no es que no ame a su familia, sí la ama, pero se confunde con el cansancio de la vida misma y hace responsable de eso a su propia familia, y vida, sin darse cuenta de que dicho cansancio es interno, es suyo, de cómo la vida le ha propuesto vivir y que él ha aceptado.
Pero debe comprender que es una guerra interna que debe trabajar, con el fin de no cometer estupideces en caliente y terminar solo sin lo que más ha amado en su vida.