¿Quién no ha tenido que aclarar alguna vez una frase que podría tomarse de diferentes maneras? A menudo, los comentarios aparentemente bienintencionados esconden mensajes sutiles no tan agradables.
Ser inteligente no consiste en tener un gran CI o ser el primero de tu promoción. Daniel Goleman, uno de los más prestigiosos expertos en inteligencia emocional, explica que esta manera tradicional de medir la inteligencia no es indicador de éxito a lo largo de nuestra vida, sino que influyen otras muchas variables.
Las personas inteligentes poseen la capacidad de comprender y controlar los sentimientos propios y ajenos. Por ello, controlan también sus palabras y su forma de comunicarse.
Nueve cosas que te conviene no decir
1. Siempre fue hecho así
Vivimos en un mundo tan globalizado y tecnologizado que la forma de realizar una tarea puede estar cambiando de un momento a otro. Asegurar que algo siempre se ha hecho de la misma manera nos hace quedar como ajenos al cambio. Si te encuentras haciendo cosas siempre de la misma manera y hace mucho tiempo será mejor que pienses en modernizarte.
2. No tengo la culpa
Siempre resulta fundamental aceptar las consecuencias de nuestros actos. Si consideras que tú no tienes la culpa de algo explícate lo mejor que puedas y listo. Limítate a contar los hechas y deja que los demás saquen sus propias conclusiones al respecto. Cuando comienzas a echar culpas a los demás es cuando los demás te ven como alguien que no asume sus responsabilidades.
3. No puedo
A tu gente más cercana nunca les parecerá grato oírte decir que no puedes. Para ellos significará que no quieres. Diciendo algo como esto estás dejando ver al otro que no cumplirás tu tarea. Si realmente no nos sentimos capaces de hacer algo es necesario focalizar nuestras energías para encontrar una solución alternativa. Digas lo que digas procura siempre hacer comentarios que tiren hacia lo positivo y no a lo negativo.
7. Lo intentaré
Decir “lo intentaré” también es sinónimo de no tener confianza en uno mismo. Resulta fundamental tomar responsabilidad de nuestros actos y si creemos poder hacer algo dejar todo en ello. Nunca es bueno anticiparse a algo y creer que no podemos lograrlo. Pues, si no te sale buscas la manera de resolverlo.
8. Tan sólo me llevará un minuto
Decir esto da la impresión de que eres una persona apurada y que hace todo a los tirones. Excepto que vayas a hacer algo realmente en un minuto, que no te de miedo expresar que la tarea puede llevar su tiempo pero la completarás. La velocidad es bueno pero ciertas veces nuestro peor enemigo.
9. Detesto este trabajo
Lo que menos quieren oír tus compañeros de trabajo son quejas acerca de como odias tu trabajo. Comentarios como este jamás te darán una imagen positiva. Los superiores tienen en claro aquellas personas de un grupo laboral que siempre están pateando la moral. Intenta ser un poco más agradecido por el trabajo que tienes.